Mi Amor Platonico

Mi Amor Platonico
Y el amor roto, cuando vuelve a nacer, crece
más bello que el primero, más fuerte, más grande.


jueves, 21 de marzo de 2013

"CAPITULO 39"




___________ se puso en pie tan pronto como cruzaron la puerta, y empezó a pasearse por la habitación.

—Esto es humillante. Sé perfectamente que lo único que le ha impulsado a venir hoy aquí es que cree que voy a casarme con el duque. ¡Qué hombre tan horrible! ¿Y cómo se atreve el duque a ir a casa de Durand y hablarle de todo eso? Él sabe que no voy a casarme con él, cuando lo rechacé fui bastante clara al respecto.

—___________, siéntate.

Ella vio que lady Fitzhugh la estaba observando tan seria que decidió hacerle caso y sentarse.

—Así que en verdad el duque se te declaró.

—Sí. —Temerosa de lo que lady Fitzhugh pudiera decirle, añadió—: Por favor, no me diga que fui una estúpida al rechazarle. Yo…

—No, no, __________, yo nunca me entrometería en algo tan delicado. Tus razones tendrás para haberlo hecho. Respeto que no quieras hablar de eso, es tu elección. Yo sólo te preguntaba si era verdad que el duque te había propuesto matrimonio, porque si lo ha hecho me gustaría darte un consejo. Si tú me lo permites.

__________ la miró sorprendida y un poco intrigada. Ella tenía en mucha estima a lady Fitzhugh y no quería oírle decir que se había equivocado al rechazar a un duque.

—¿Consejo?

—Sí. —La mujer cruzó las manos sobre su regazo y guardó silencio un momento. Después empezó a hablar—. Antes que nada, quiero que sepas que te tengo mucho cariño, querida. Tú has sido una excelente compañía para mis hijas, ya que siendo mayor que ellas has logrado transmitirles cierta serenidad y responsabilidad. Pero yo soy mayor que tú, y esos años me han hecho más sabia, o eso espero. Por favor, permite que te de un consejo y entiende que lo hago sólo pensando en ti y en tu felicidad.

—Por supuesto, puede darme todos los consejos que quiera. Usted ha sido muy amable conmigo, me ha abierto las puertas de su casa, ha sido mi amiga y… —se le rompió la voz y tardó un momento en poder continuar—. Lady Fitzhugh, le estoy tan agradecida. Usted me ha tratado como si fuera una más de la familia y las palabras no logran expresar…

—Tranquila, hija —dijo, dándole unos cariñosos golpecitos en la mano—. Y llámame Elinor, querida. Y tienes que saber que para mí ya eres en efecto una más de la familia —añadió sonriendo—, aunque quizá ya no te guste tanto después de que oigas lo que quiero decirte.

__________ se preparó para lo inevitable.

—Va a decirme que debería ser más lista y aceptar la proposición del duque.

—No, no, tú ya eres mayor para saber lo que hay en tu corazón y en tu cabeza. Además, ser duquesa es una enorme responsabilidad, y entiendo perfectamente tu reticencia a ocupar ese puesto. No estoy segura de que me gustara para una de mis hijas. No, mi consejo se refiere al barón.

—¿Al barón?

—Sí, ___________. A pesar de lo feliz que me hace considerarte un miembro de mi familia, eso no altera que el barón es realmente tu abuelo. Entiendo perfectamente tu orgullo, yo también tengo y comprendo que te indignen sus motivos. Sin duda, el hecho de que el duque se interese por ti ha motivado este reencuentro familiar. Sin duda, le interesa emparentar con el duque Tom. Y teme las críticas de la sociedad si se sabe que se negó a ayudarte en tu momento más delicado, a consecuencia de lo cual te viste forzada a trabajar. Pero a pesar de sus motivos, yo te aconsejaría que le permitieras hacer lo correcto y que te reconociera como a su nieta. Deja que actúe como un generoso y benevolente abuelo, al menos por ahora.

__________ iba a hablar, pero lady Fitzhugh le tocó el brazo y decidió callarse.

—Por tu bien, _________ —continuó lady Fitzhugh—, seré, directa y te hablaré como si fueras hija mía. Tú eres una mujer práctica, pero en este tema dejas que el orgullo te nuble el juicio. Si insistes en rechazar al duque, él tarde o temprano desistirá de su empeño, pero si permites que Durand te reconozca ahora, él no podrá dar marcha atrás aunque no llegaras a casarte con el duque. Tendrás su protección y su apoyo y no tendrás que temer nunca más por tu futuro. Antes de que llegaras, he estado hablando con él, y he llegado a la conclusión de que, si bien no es un hombre muy rico, tiene suficientes rentas de todas sus propiedades y podrá mantenerte sin problemas. Querida, tú ya sabes lo que es pasar penurias, sabes lo dura que puede llegar a ser la vida. No permitas que tu orgullo te prive de tener la seguridad y la protección que tu abuelo puede brindarte. El duque, seguro que con intención de ayudarte, le ha ofrecido al barón la posibilidad de corregir todo el mal que te ha hecho. Permite que Durand alivie su conciencia y te reconozca.

_________ tomó aire y lo soltó lentamente.

—Tiene razón. Él se había negado de tal modo a reconocerme que hoy, cuando ha venido aquí y he visto tan claro que lo único que quería era ganarse el favor de Tom, he sido incapaz de razonar. Rechazar que me reconozca sería en verdad estúpido.

—¿Tom? —Lady Fitzhugh repitió el nombre con una voz tan reflexiva que _________ se sonrojó. Pero lady Fitzhugh era una mujer discreta—. Una taza de té nos iría bien a las dos, ¿no crees? —le sugirió.

Apenas acababa de llegar el té cuando los caballeros volvieron a entrar en el saloncito. Ella y lady Fitzhugh se levantaron y sir Edward se acercó a __________.

—El barón me ha confirmado su reconocimiento como nieta suya. —Le apretó cariñosamente el hombro—. Tu futuro está asegurado, querida.

__________ miró al barón y, siguiendo el consejo de lady Fitzhugh, le permitió tranquilizar su conciencia.

—Gracias —dijo educadamente—. Es usted muy amable.

—También hemos llegado a un acuerdo sobre tu situación —continuó sir Edward—. Lord Durand permite que te quedes con nosotros. Se da cuenta de que te has convertido en una gran amiga para Elizabeth y Anne, y cree que lady Fitzhugh será una excelente compañía para ti. Te ofrece una pequeña asignación para tus gastos de diez libras semanales y dice que puedes utilizar su nombre siempre que lo necesites.

—Eso es muy generoso por su parte, lord Durand —añadió lady Fitzhugh—. Tanto si se casa con un duque como si no, una dama necesita ropa y otras cosas por el estilo. ___________ es una amiga maravillosa para mis hijas y estamos encantados de que se quede aquí con nosotros. Procuraré que haga uso de su generosidad sabiamente.

—Gracias —dijo el barón, y se dirigió hacia ella tosiendo un poco—. _________, sólo espero que cuando entiendas la situación, puedas llegar a sentir cierto afecto por mí.

Hizo una reverencia y se fue.

Tan pronto como Mary hubo cerrado la puerta, Elizabeth y Anne entraron corriendo en el saloncito.

—¿Qué ha pasado? —preguntaron las dos a la vez.

—El barón es el abuelo de _________ —les informó su padre.

Las dos gritaron sorprendidas y se volvieron para mirar a __________.

—¿Por qué no nos lo habías dicho? ¿Por qué estabas trabajando para el duque si eres la nieta de un barón?

—El barón no me había reconocido —contestó ___________ con amargura al recordar lo asustada que había estado en Tánger—. Ahora lo ha hecho.

—Durand permite que se quede con nosotros —le comunicó sir Edward a sus hijas—, y le ha ofrecido una asignación que estoy convencido de que vais a enseñarle cómo gastar lo más rápido posible.

—Oh, sí, seguro que sí —dijo Elizabeth riendo—. Vestidos nuevos, sombreros, y todo lo que pueda necesitar una mujer a la que está cortejando un duque. Primero nos ha visitado un duque, luego un barón. Seguro que cuando acabe la semana ya nos habrá visitado también un conde.

___________ hizo una mueca.

—El barón sólo está siendo generoso porque cree que voy a casarme con el duque. Ahora que mi futuro ya está asegurado, creo que es un buen día para empezar a gastar ese dinero. ¿Pueden acompañarme Anne y Elizabeth? —le preguntó a lady Fitzhugh.

—Claro que sí, querida —respondió la mujer—. ¿Adónde vais a ir?

—A DeCharteres, tengo que mandar mi respuesta al duque.

Anne y Elizabeth estaban entusiasmadas de ir con ella a la floristería para ver en persona qué flores escogía como respuesta. Pero lady Fitzhugh sólo levantó las cejas ante la noticia.

—Contestarle es muy cariñoso de tu parte, querida.

—Cuando él lo vea, Elinor, dudo que esté de acuerdo con usted.
 
CHICAS   aqui con un nuevo capi.. sorry si es corto.. pero es que la verdad no tengo mucho tiempo... espero que les guste la respuesta que le dara TN a Tom.. ya mañana sabran jaja xd...
 
Las Quiero
Bye =)
 
PD: Jennifer... me tienes que decir y hacemos un baby shower  a la Ale jajajaj xd

3 comentarios:

  1. El abuelo de (tn) sera un interesadoo? O de verdad esta arrepentido?

    Siguelaa esta hermosa la fic.. Ojala q este embarazadaa!! Ya quiero ver la respuesta q le dara ...

    Tamara ya como hariamos para hacer el baby shower!! Uno virtual podria ser no?
    Hahahaga.. Bye cuidate.. Me dices ahh?

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  2. esto se pone cada vez mas bueno :3
    ya quiero saber la respuesta de TN
    AHHH Y que bueno que lord Durand reconocio
    a su nieta *-*

    bueno bye cuidate
    espero el proximo capitulo
    con ansias...

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  3. HOLA! bueno ya lei los dos capitulos y esta genial .. ojala y el abuelo este de verdad arrepentido :D bueno cuidate ... ya leo este bye

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